Vertavillo se encuentra en un punto geográfico y estratégico de inmejorables ventajas, asentado sobre el extremo de una plataforma residual de los páramos calcáreos que dominan el paisaje de El Cerrato. Desde su atalaya natural, de fácil defensa, se domina una amplia y fértil vega bañada por el Arroyo de los Madrazos (Maderazo) así como las vías de comunicación que la atraviesan. Esta es la causa de que desde temprano, ya en tiempos prerromanos, es decir, durate la segunda Edad del Hierro, se asentara en el lugar una importante población vaccea. Los restos de este viejo poblado vienen siendo mencionados desde hace tiempo por algunos historiadores, los cuales reconocieron en los alrededores del caserío actual fragmentos de vasijas de tipo celtibérico, molinos de piedra y algunos objetos de metal. La existencia de este primitivo poblado se ha visto confirmada en las recientes excavaciones arqueológicas (1999) llevadas a cabo en el pago de "Las Chozas", donde se han exhumado los cimientos de tres vivendas de adobe y tapial, un buen número de hoyos-silos circulares excavados en el suelo y una alineación de grandes piedras calizas que sirvió de acera en el exerior de las mismas. Al mismo tiempo se ha recuperado una importante colección de piezas cerámicas y algunas armas y herramientas de metal.
 

Restos del suelo de arcilla compactada del interior de la Vivienda I.	Visión panorámica de la Viviendas I desde el Norte

    Esta primera ocupación estable del solar de Vertavillo, que pudo iniciarse en torno al siglo III o II a.C., debió alcanzar hasta la plena romanización de esta comarca, algo que podemos fechar a finales del siglo I a.C. No es muy probable que la antigua ciudad vaccea fuera transformada en una civitas romana, puesto que no existen en superficie restos que así lo hagan entender. Más bien pudo ocurrir, como en otras ocasiones, que sus habitantes fueran trasladados a algún centro urbano próximo, siguiendo la política dictada desde Roma de agrupar a la población. Para este momento, por otra parte, no faltan investigadores que afirman que por este término pasaba la vía romana Viminacium-Clunia-Balsio, que comunicaría dos ciudades vacceas romanizadas como Roa y Palencia; una calzada que algunos han querido identificar con un viejo camino empedrado que se dirigía a Valle de Cerrato.
 

Cerámicas a mano. Vaso trípode con decoración impresa e incisa	Cerámica a mano con decoración incisa, impresa y plástica.

    En los últimos siglos del Imperio Romano, en los momentos en los que la vida urbana sufre un destacado retroceso y proliferan los grandes complejos rústicos de explotación agraria, se instala una Villa a escasos kms. del pueblo actual, sobre la vega del Arroyo de los Madrazos, lugar donde se han encontrado tejas (tégulas e ímbices), típicas cerámicas de Terra Sigillata, teselas, trozos de vidrio, pesas de telar y ladrillos circulares.
 

Cerámica a torno. Jarrita de pie anular y borde vuelto y pintada con un motivo de cestería	Cerámica a torno. Tapadera con decoración pintada a base de ondas.

Cerámica a torno. Pared de vaso contenedor globular con borde vuelto y decoración moldurada	Producciones cerámicas singulares. Canicas